top of page
MAPFRE Salud_Banner 1970x600.jpg
  • Auxihostelería

Cómo hacer un buen café en tu bar o restaurante


Como hacer un buen café con una cafetera industrial puede parecer algo sencillo pero el hecho es que es más complejo de lo que parece a primera vista. El café es uno de los productos más rentables en cualquier negocio. De hecho, algunas cifras señalan que el consumo de café supone el 20% de la facturación de los establecimientos de hostelería, en algunos incluso más. Y es que, ¿a quién no le gusta tomarse un buen café en el desayuno, después de comida o con el postre?


Pero no en todos los lugares se puede disfrutar de un espresso aromático y de textura aterciopelada, por ejemplo. Y es que muchos locales, además de no contar con un barista profesional, cometen muchos errores al momento de preparar esta bebida. Por ello, si quieres que tu negocio destaque, debes saber todo lo necesario sobre el café para poder preparar uno realmente bueno que guste a la clientela.


Tipos de cafés más solicitados en hostelería

Los amantes del café saben que esta es una bebida inigualable. Además, cada uno suele tener su favorito, ya que existen muchas variedades. Si tienes un negocio de hostelería debes conocer cuáles son los más solicitados por los clientes y saber cómo prepararlos para cumplir con sus demandas. Los cafés se pueden agrupar en varias categorías, pero los más comunes suelen ser los solos y los que son con leche, aunque también los dulces y los que llevan licor. Estas son las variedades más populares de cada uno.


Espresso: el más conocido de todos por ser la expresión más pura del café. Se trata de un café negro fuerte que se obtiene al pasar agua caliente a alta presión. Se utilizan 7 o 7.5 gramos de café con agua a temperatura entre 88 y 92 °C en un tiempo que no debe pasar los 30 segundos.


Espresso doble o doppio: es un café doble e intenso que se prepara utilizando el doble de café que se usa en el solo. Su tiempo de preparación es de 1 minuto más o menos.


Americano: es un café que lleva una mayor cantidad de agua. Originalmente se prepara añadiendo agua caliente a un espresso.


Café con leche o Latte: es el clásico café con leche, el cual se caracteriza por tener un sabor intenso a café con una textura homogénea gracias a la leche. Se consigue mezclando un café espresso con leche caliente vaporizada a partes iguales.


Cortado: solo lleva un pequeño chorro de leche, de 2 a 4 centímetros cúbicos de esta.


Lágrima o leche manchada: se trata de una variación del café con leche porque cambian sus proporciones. Se prepara con un 1/3 de café y 2/3 de leche normal.


Capuccino: es uno de los más populares en el mundo y se consigue al mezclar café espresso, leche caliente y espuma de leche a partes iguales.


Mocaccino: el café moca, como también se le conoce, es otra variante del café con leche o incluso del capuccino, ya que lleva los mismos elementos y cantidades de este pero se le agrega sirope de chocolate.


Bombón: se prepara con un café solo largo junto a una dosis de leche condensada. Se sirve en vasos de cristal para apreciar las capas del café, ya que la leche se va al fondo y el café queda en la parte superior.


Carajillo: para su preparación se utiliza café, brandy o coñac, granos de café y corteza de limón. Se calienta el licor con los granos de café y la piel de limón, luego se le agrega el café recién hecho y finalmente se extraen los granos de café y el limón.


Pasos para hacer un buen café

A pesar de la variedad de cafés que existen, el espresso es considerado el rey, porque es la mejor forma de prepararlo y el que prefieren la mayoría de los consumidores. También es la base de muchos de los cafés más pedidos en el mundo. Por ello, es fundamental saber cómo prepararlo bien.


Lo esencial es contar con un buen café. No lo compres molido, ya que una parte vital en la preparación de un buen café está en la molienda. Podrías perder aroma y sabor, y esto afectará la calidad final del producto. Estos son los pasos a seguir para iniciar el proceso.

  • Muele el café al momento de preparar la taza. Es importante tener especial cuidado al molerlo, ya que de esto dependerá el resultado final. Según los expertos, el punto de molido adecuado es cuando en 25 segundos caen 25 mililitros de café en la taza. Usa un molinillo de café profesional para unos resultados óptimos, pero asegúrate de tener el molino siempre bien ajustado

  • Después de esto lo siguiente es preparar la máquina. El filtro debe estar limpio, la temperatura debe estar en 90 grados y la presión en 8.5 bares.

  • Utiliza entre 7 y 8 gramos de café molido, que debe estar bien prensado.

  • Tras el prensado, debes colocar el café molido en la máquina para que el agua pase a través de él durante 25 segundos con una presión elegida.

  • Si es con leche, no debes calentarla a más de 65 °C.

  • Es recomendable utilizar tazas cónicas, porque favorecen la cremosidad del café.

  • Si tienes en cuenta estás recomendaciones podrás preparar un excelente café en tu negocio. Sin embargo, también debes prestar atención para no cometer los errores más comunes que suelen ser no limpiar la máquina entre la preparación de una taza y otra, moler más café del que se necesita y no controlar bien el punto de molido.

Recuerda que la clave para hacer un buen café también está en la máquina. Debes elegir una de tipo industrial y profesional que te ofrezca todas las prestaciones necesarias para hacer un excelente café.


Trucos básicos y fáciles para hacer café en tu negocio de hostelería

Si cuentas con un bar o restaurante, o casi cualquier local en el que sirvas comidas estamos seguros que te demandarán café al terminar. Es algo muy típico que en España hacer la sobremesa de una agradable comida tomando un buen café. Sin embargo, son pocos los lugares donde se cuide esto realmente y consideramos de vital importancia que tengas muy presente que el café es el final de la comida y el ultimo sabor que van a experimentar tus clientes. Un café malo puede dar al traste con una estupenda comida. Por ese motivo te expondremos algunos trucos para hacer un buen café y que tus clientes se vayan con un buen sabor de boca.


Lo primero que debes saber es que debes adquirir una cafetera industrial por varios motivos. El primero es que en este tipo de cafeteras puedes realizar varios cafés a la vez lo cual te permitirá ahorrar tiempo y esfuerzo en el caso de que tu demanda sea alta. Si ofreces desayunos seguramente la cafetera estará en uso constante así que dependiendo de ésta tendrás que determinar si comprar una cafetera de uno, dos o más grupos. También es conveniente que te hagas con un buen molino de café para moler el grano en el instante. A continuación te damos unos cuantos consejos:


1. Utiliza café natural 100%.

El café natural es el de mayor calidad y el que mejor resultado da para hacer un buen café. Hay todavía bastante tradición en España de usar cafés torrefactos, que son más baratos pero la diferencia de precio no justifica la pérdida de calidad en el café. Además necesitamos aproximadamente unos 7 gramos de café para hacer un buen café. Por tanto, por cada kilo de café podemos hacer alrededor de 140 cafés. Entendemos que se puede asumir perfectamente la diferencia de 1 o 2 € que hay de diferencia entre un café natural de buena calidad y uno torrefacto de mala calidad. Si es posible además, usaremos cafés de la variedad arábica a ser posible. También podemos usar alguna mezcla con café robusta pero si podemos evitarlo mejor que mejor.


2. Muele el café tu mismo

Lo ideal es moler el café justo antes de prepararlo. Para ello compra el café en grano y usa un molino de café industrial para molerlo al instante. Siempre asegúrate de que el molino esté en perfectas condiciones, limpialó al final de la jornada retirando los aceites que pueda dejar el café y retira de las muelas los restos de café molido. Jamás añadas a la tolva del molino café ya molido que se haya derramado por accidente ya que puede dañar las fresas. Estas es aconsejable sustituirlas cuando se hayan consumido unos 500 Kg. de café. Si molemos nuestro café en grano con unas muelas desgastadas podemos quemar el café al tener que molerlo demasiado.


3. Aprende la técnica de crear crema de leche

Es todo un arte y requiere de práctica y de ciertos aspectos a tener en cuenta. Te dejamos un vídeo para que aprendas la técnica de la mejor manera posible. Recuerda que es importante que aprendas la temperatura óptima en la que la leche debe «cremarse», usa un termómetro de barista las primeras veces hasta que tu mismo sepas apreciar con el tacto cual es la temperatura correcta (que es de unos 60 grados). Si lo haces correctamente podrás usar esta técnica incluso para hacer pequeños diseños en el café, dando un toque refinado y con clase a tu café.



4. Depura el agua

No uses directamente el agua de la red para hacer los cafés, la cal es un elemento que da bastante sabor al agua y obviamente al café. Por tanto cuanta menos cal lleve el agua de tu cafetera mucho mejor. Si este motivo no es suficiente para que uses agua descalcificada, te diremos que cuanto más dura es el agua de la red, menos va a durar la cafetera ya que la cal las deteriora mucho. Si no tienes general para toda el agua de tu local, puedes optar por colocar un descalcificador individual para la cafetera. En este artículo te enseñamos como instalar un descalcificador.




264 visualizaciones0 comentarios
1000x-1.jpg
MAPFRE Salud Email banner 1070x600.jpg
AdobeStock_365594858.png
bottom of page